Rayo 0 - At.Madrid 1

La incertidumbre reinaba entre los atléticos antes del partido. Los últimos resultados fuera de casa y la forma de encarar las visitas a Zaragoza, Gijón o Santander hacían presagiar lo peor. Pero el equipo está en una situación agónica, a punto de perder el último tren que podría llevar a Europa y, por tanto, cabía esperar una reacción del equipo, un planteamiento serio. Por otra parte, las fuerzas justitas y el próximo partido de semifinales contra el Valencia podían llevar a un reservar fuerzas excesivo.

El Atlético, capaz de lo mejor y de lo peor esta temporada saltaba al campo con un Cholo que pasaba factura a los Arda y Godín del mal rendimiento en el partido contra el Madrid y que reservaba a Gabi para el partido europeo apostando por Mario en Vallecas. Los primeros quince minutos fueron los peores del Atlético en todo el partido. El equipo salía, una vez más, reservón y maltrataba el balón con patadones al mismo en defensa en lugar de intentar elaborar juego. Entre el minuto quince y el treinta se vio un ligero cambio de enfoque en el juego del equipo. Parece que el Atleti se empezaba a tomar el partido en serio tras una primera toma de contacto. Si el brillo de otras tardes, el equipo empezó a combinar y llegó un gol correctamente anulado que anunciaba las intenciones del equipo de matar el partido en una contra. Nadie brilló, alguno incluso menos del mínimo que se le podía exigir, pero el partido parecían tomárselo en serio.

En la segunda parte, más de lo mismo. Partido muy luchado y muy trabado en el centro del campo y pocas oportunidades para ambos equipos. Los porteros salvaron a los dos equipos en remates de cabeza y, por fin, en una contra con balón largo al hueco de Juanfran y desmarque de Falcao, regate al portero y remate, llegó el gol del Atleti. Poco más se puede reseñar del partido. Aburrido, soso, muy luchado, pocas oportunidades y al final ganó el que tuvo mejor pegada, que fue el Atlético. Nadie destacó en el Atlético excepto Courtois y Falcao. Nadie deslumbró con su juego, pero todos medio cumplieron, y eso fue suficiente para llevarse los tres puntos ante un rayo que no fue el de otras tardes de gloria.

• Courtois (4): Baluarte defensivo del equipo. Muy seguro en todas sus acciones. 
• Juanfran (4): Muy bien en defensa y sumándose al ataque continuamente. 
• Miranda (3): Más seguro junto a Domínguez que junto a Godín. Se complementan mejor. 
• Domínguez (4): Muy buen partido dejando claro que debe ser siempre titular en este equipo y que debe jugar como central y no como lateral suplente. Nunca se debió caer del once titular. 
• Filipe Luis (4): Defendió bien pero, sobre todo, se sumó al ataque con frecuencia y efectividad. 
• Mario (2): No aportó prácticamente nada. Mal partido que obligó a sus compañeros a realizar esfuerzos extra en defensa. 
• Tiago (2): No tuvo su noche. Mal juego aunque presionó bastante en defensa. No consiguió imponerse a los rayistas en el centro del campo. 
• Diego (2): Tampoco deslumbró como otros días. Prácticamente no participó en el juego y eso lo nota el equipo. En su descargo, que tuvo que realizar más tareas defensivas que habitualmente. 
• Salvio (2): Excepto un par de desmarques en carrera, no aportó prácticamente nada. 
• Adrián (2): A pesar de dejar clara en varios detalles su gran calidad, no fue el delantero desequilibrante de otros partidos. 
• Falcao (5): El mejor del equipo. Luchó, bajó a por balones, marcó un gol que le anularon y no paró hasta que logró un tanto que subiera al marcador. Pesadilla constante para la defensa del Rayo. 
• Arda (2): Salió en la segunda parte y, como el resto del centro del campo, tampoco tuvo su día. 
• Perea (-): Entró en los últimos minutos, algo que ya suele ser habitual en el Cholo. 

Resumiendo, partido feo pero bien gestionado por el equipo en el que obtuvo un premio. Lo mejor, los tres puntos que se merecieron más contra Sporting o Racing pero que se obtuvieron en Vallecas. Es curioso pero, a pesar de los deméritos que ha hecho en esta mediocre temporada, el Atlético sigue asomado a los puestos europeos y con opciones incluso de clasificarse para unos puestos de Champions que este año están más asequibles que nunca. Además, aquí no se le puede restar ni un ápice de mérito, el equipo está también en semifinales de la Europa League. Una competición en la que el equipo parce otro y sale a los partidos con la motivación y la ambición que a veces le falta en liga.

Afrontamos una semana decisiva por el partido del jueves, en el que se debe empezar a luchar el pase a una final europea que está a 180 minutos de distancia y por el partido el domingo ante el Español, rival directo, que se tiene que ganar para no desengancharse del objetivo de Champions. La duda, la de las últimas semanas, ¿aguantarán las fuerzas?